⚖️ Principios esenciales del Derecho Civil⚖️
Igualdad ante la ley
- Garantiza que todas las personas reciben el mismo trato ante la ley.
- Evita cualquier tipo de discriminación en contratos, propiedad o herencias.
- Promueve relaciones justas y equitativas dentro del marco legal.
Libertad contractual
- Permite que las partes definan libremente el contenido de sus acuerdos.
- Fomenta la autonomía privada y la flexibilidad en las relaciones jurídicas.
- Tiene límites: debe respetar el orden público, la ley y la moral.
Buena fe
- Exige actuar con honestidad, lealtad y transparencia en las relaciones jurídicas.
- Refuerza la confianza entre las partes y previene conflictos..
- Su incumplimiento puede generar responsabilidad civil o nulidad del acto.
Responsabilidad civil
- Obliga a reparar daños causados por acción u omisión.
- Se aplica tanto por incumplimientos contractuales como por hechos ilícitos.
- Busca restablecer el equilibrio afectado por el daño causado.

📚 Ramas del Derecho Civil
Regula los vínculos jurídicos que surgen cuando una persona (deudor) se compromete a cumplir una prestación a favor de otra (acreedor), ya sea mediante un contrato o por disposición legal. Estudia la formación, validez, efectos y extinción de los contratos, así como las consecuencias del incumplimiento, como indemnizaciones o ejecución forzosa. Esta rama es esencial para dar seguridad a las transacciones comerciales y personales, protegiendo los derechos de quienes intervienen en acuerdos legales.
Se encarga de las relaciones jurídicas basadas en vínculos familiares. Regula el matrimonio, divorcio, unión marital de hecho, filiación, adopción, patria potestad, custodia y alimentos. Su objetivo principal es proteger el bienestar de los miembros más vulnerables de la familia, especialmente menores e incapaces, y garantizar que existan derechos y deberes equitativos entre quienes integran el núcleo familiar. Esta rama incorpora principios de orden público para asegurar la estabilidad y la protección de la institución familiar.
Establece las normas que regulan la transmisión del patrimonio de una persona fallecida a sus herederos o legatarios. Incluye cuestiones como la sucesión testamentaria, legítima, intestada, las legítimas, y el proceso de partición y adjudicación de bienes. Su finalidad es garantizar que las disposiciones del causante se cumplan y que la distribución de bienes se haga de forma justa, evitando conflictos entre herederos. También fomenta la planificación patrimonial mediante herramientas como el testamento.
Regula las facultades de uso, disfrute y disposición de los bienes por parte de sus titulares, así como los límites y obligaciones inherentes a esos derechos. Incluye instituciones como la posesión, usufructo, uso, habitación, servidumbres, hipoteca y otras cargas reales. Esta rama proporciona seguridad sobre quién es el propietario de un bien y cómo puede transmitirlo, afectarlo o defenderlo frente a terceros. Es básica para el desarrollo del mercado inmobiliario y de la economía en general.